Una bodega vanguardista en el corazón del Somontano cuya arquitectura es reconocida por la prensa a nivel internacional como “Una de las Maravillas Arquitectónicas del Mundo del Vino”.
Cuenta con 355 hectáreas de viñedo en propiedad en el Somontano. Cultivando cepas de bajo rendimiento, primando la calidad frente a la producción.
Una apuesta por el conocimiento, por ser mucho más que una bodega en la que se elabora vino.